Magiqueando con Abel Delgado

Hoy la magia se viste de canario y nos muestra un rostro risueño y lleno de simpatía y es que el mago que nos visita es todo un profesional, con una alegría tan grande que es inevitable no sentirse contagiado de su entusiasmo, con solo compartir unas palabras o verlo subido actuando tanto para grandes como para pequeños.

Buenos días Abel, 

Quería agradecerte que estés aquí compartiendo tus vivencias y dediques unos minutos a nuestros lectores porque sé de buena tinta que no paras. 

¿Podrías contarnos cuál fue tu primer encuentro con la magia?

Ni yo lo sé (risas). Según mi memoria, mi primer contacto con la magia fue de pequeño a los 8-10 años (8 a los arriba, 8 años abajo), cuando vi a Juan Tamariz en el programa de televisión 1,2,3 responda otra vez. 

Me fascinaban sus apariciones, su puesta en escena tan cautivadora me atrapaba y disfrutaba mucho su show. Peeeero, hace unos años me reencontré con una amiga de la infancia y me quedé bastante sorprendido cuando me contó que a los 4-5 años yo le hacía juegos de magia (seriously?) Según ella, sentaba a su hermana y a ella misma y hacía una especie de teatrillo  y realizaba juegos de magia de vete tú a saber qué. 

Así que puedo contestar que ni tengo ni idea, pero se ve que iba conmigo, cosa que me agradó mucho averiguar. 

Así entre tú y yo, ¿Cómo es un día en la vida del mago Abel Delgado? 

Bastante normalito. No es que sea un mago a full-time, suelo encargarme de cosillas de la casa, cocinar, ensayar, estudiar… pero no tengo un horario rígido que tenga que seguir a raja tabla, me permito ser flexible ahí. 

Vamos a entrar en harina ¿Cómo te estructuras a la hora de montar un show? 

Es un tema interesante. Eso es algo que le pregunté a mis profesores de la Escuela de Ana Tamariz allá por el 2002-2003 y no recuerdo una respuesta concreta. Según mi experiencia y mi estilo de magia, suelo tener en cuenta varias cosas: Un show debe de ser variado en emociones y efectos, pero también debe de ser de carácter activo para el público. No quiero que el público se siente, vea, aplauda y se vaya. Por tanto, suelo hacer una mezcla de efectos y emociones siguiendo una curva dramática (Juan Tamariz) a la vez que mezclo efectos donde participe algún espectador aislado, alguna pareja o todo el público. Me gusta que cuando un espectador vaya a verme, no sepa en qué momento va a participar ni cómo, pero lo hará. 

Por otra parte, no he hecho hasta ahora un show con un hilo conductor en sí mismo, cuando lo haga, espero presentarlo en Teatros, si Dios quiere y la burra no se muere. 

¿Es complicado encontrar momentos de ensayo en el día a día, cuando uno está de un lado para otro?

Creo que es importante fijarse horarios y cumplirlos. Yo no lo hago. Ensayo cuando puedo y sobre todo cuando me surge la necesidad de mejorar algo, perfeccionarlo o reeducar el manejo de algo (juego, técnica o presentación). Lo mismo no ensayo en una semana o lo mismo estoy un día desde las 9 de la noche hasta las 4 de la mañana trasteando con algo. En mi caso, la magia es profesión pero sobre todo pasión. Si estoy una época que no sienta motivación, no ensayo ni toco una sola carta. 

La anterior pregunta, me lleva a plantearte cómo te consideras,  un mago más teórico, más técnico o ni lo uno ni lo otro. 

En un principio, cuando la magia empezó en mí, pasaba olímpicamente de la teoría, sólo quería aprender juegos visuales AMERICAN STYLE, pero según fui madurando como mago, fui dándome cuenta de la importancia de la teoría en la magia. 

Como decía Gabi Pareras, hay que leer de todo y robar de todo (entendamos robar con coger ideas, no plagiar), y a partir de ahí, leer poesía, literatura, ver todo tipo de artes escénicas, escuchar todo tipo de música y es posible que, a más nos nutramos, más pronto sonará la campanilla que nos diga “oye esto quedaría muy bien aquí” es decir, nuestro banco de recursos artísticos es más amplio y podremos conectar más cositas (recomiendo ver la conferencia TED de Jandro-  TED x Moncloa). 

Por todo esto, hoy en día no concibo ni un pequeño efecto flash sin una base teórica, con un argumento interesante y una metodología correctamente justificada. Hacer eso sería algo así como comer comida rápida. 

¿Qué opinas acerca de la formación en un mago? ¿Crees que es constante o hay que parar en algún momento? 

Yo creo que hay que ser humilde en la vida. Con esto quiero decir que, si uno quiere ser bueno en algo tiene que formarse por supuesto, pero en un arte como es la Magia, que aun no está desarrollado por completo, que no tiene unos cimientos bien definidos sino que nos nutrimos de ideas de la Escuela de Magia de Madrid (Ascanio, Tamariz, Carrol, Camilo Vázquez…), ideas de algún europeo (Fred Kaps, Hofzinser, Lennart Green), o algún americano (Vernon, Williamson, Slydini)…pues vamos conformando una serie de cimientos teórico-prácticos pero que le quedan muchos años por consolidarse y por evolucionar. 

Sería ingenuo y soberbio pensar que, estudio magia unos 10-15 años y ya me lo sé todo. Si bien es cierto que hay profesionales que tienen sus bases teóricas y simplemente actúan y hay otros que apenas actúan y sólo estudian. Imagino que también depende de cómo quiera cada uno enfocar su carrera artística. 

A mí personalmente me gusta seguir leyendo, comprendiendo a los grandes maestros y estudiando sus efectos y poco a poco seguir mejorando como mago y como entendido en el arte de la magia. No me fijo una fecha final para decir “YA ME LO SÉ TODO”, sentiría lástima por aquel que piense así. 

Como amante de los libros que te considero, ¿Cuál es el libro o los libros que te han sorprendido más de lo que esperabas? 

Ojalá tuviese dinero como para comprarme todos los libros que quiero (risas). De todos los libros se aprende algo, al igual que pasa con las personas. Pero, si es verdad que tengo mis favoritos. El libro que mayor cambio produjo en mi carrera sin duda alguna ha sido “Libertad de expresión” de mi querido Dani DaOrtiz. Para mi, fue un libro que pasó de ser dura teoría o una librería de efectos al desarrollo de la PERSONALIDAD del mago. Lo recomiendo a todo mago o aficionado que se precie pero ojo, no es un libro para iniciados, al menos deberían de haber estudiado magia unos 5-7 años (siempre bajo mi punto de vista).

Otro autor que me gusta mucho es Roberto Giobbi. Es una auténtica fuente de conocimiento. Ha empleado toda su vida en estudiar este maravilloso arte y difundirlo a través de innumerables publicaciones  Cualquier libro de Giobbi es fantástico. Ahora mismo estoy leyendo la Agenda Secreta, la Agenda Oculta y su Twitter Mágico. Hay que recordar que se aprende magia leyendo magia y haciendo magia.

Y por supuesto, dos magos españoles que son maravillosos y que son el reflejo de la generación más intensa de la magia en nuestro país, Alberto de Figueiredo y Joaquín Matas. Sus libros son una mezcla perfecta de buena teoría, bien aplicada y con un buen equilibrio de magia purista/comercial. 

Quiero matizar también las obras escritas de Juan Tamariz, Arturo de Ascanio, de John Carney, de Tommy Wonder y las colecciones de la Gran Escuela Cartomágica y los Roberto Light, Super Light y Extra Light de Giobbi. Todos esos van a la mesota de noche. 

¿Qué magos te han marcado más? 

Si tuviera que elegir a un sólo mago, ese sería Dani DaOrtiz. Su concepción mágica, estilo cercano y aparentemente improvisado se acercan al concepto de magia que siento, me gusta pensar que si el mago realmente tuviese poderes (que los tiene, ojito), la magia acontecería sin necesidad de grandes escenificaciones ni coreografías estruendosas o visualmente preciosas pero más propias de teatros clásicos. Creo que la sociedad evoluciona en su capacidad del asombro, en su inteligencia y en su capacidad de ser engañada y por tanto, la magia, como arte vivo que es, necesita evolucionar con las épocas para seguir acometiendo su significante. 

Por supuesto que todos los magos que he visto en vivo, en video, en conferencia…me han aportado mucho. Creo que Tamariz es una fuente inagotable de conocimiento a la que me gustaría acercarme algún día, por ahora queda conformarse con sus obras. La concepción Vernoniana y Ascaniana son fundamentales para mí, pero me reitero que como mago, me quedaría con Dani. 

Te he visto en varias facetas pero qué rama de la magia es la que más te llama y te invita a recrearte y a reinventarte constantemente. 

La verdad es que mi pasión siempre ha sido la magia de cerca. Si bien es cierto que me desenvuelvo cómodamente en la magia de escena, en la magia infantil y en la magia cómica en general, pero siento que en la magia de cerca se crea un vínculo mucho más íntimo y poderoso donde se pueden generar ciertos niveles emocionales que la magia escénica le cuesta más, por su naturaleza. Es cuestión de estilos. 

Algo que siempre me he preguntado, desde que te vi por primera vez, por la forma que tienes de transmitir. ¿Eso se consigue a base de ensayo y error o viene ya de serie? 

Si te he transmitido algo, eso es tuyo, no mío (risas). Me alaga que me plantees la pregunta de esta manera. Yo creo que como todo, hay una parte innata y una parte aprendida. El talento sin ensayo se pierde o no se llega a desarrollar plenamente. Creo que el teatro ayuda mucho en el desarrollo de la expresión del artista. 

Por otro lado, como dice Dani, hay que hacer magia y mientras más, mejor. A todo el que se pueda; solo de esa manera lograremos mejorar nuestras habilidades sociales y como magos podremos ir encontrando nuestra personalidad. Se tarda mucho, pero eso es porque las cosas buenas requieren tiempo (risas). También recomendaría ver a todos los magos posibles. Es interesante ver la amplitud de estilos que existen…y los que faltan por crearse. 

Por último me gustaría recordar a los nuevos magos que se vienen, que lo más importante de todo, a pesar de tener cada uno sus referentes, sus favoritos etc, es que deben desarrollar su propia identidad como magos y que se diviertan. De esta manera uno no es una réplica ni una copia de Fulano o Mengano, el público debe querer ver al mago que uno lleva dentro (qué bonito me ha quedado), a la persona en primer lugar, si esta persona disfruta con lo que hace, el público lo hará en la misma medida,  y en un segundo plano íntimamente ligado a la personalidad, estaría la magia que realice. 

Después de tantos años, ¿qué aprendizajes te gustaría compartir con aquellos que están empezando? 

Es muy importante que las nuevas generaciones que vienen estudien de dónde venimos, lean mucho, muchísimo y se reunan y compartan con otros magos y magas. Mientras más tiempo empleen en ver magia, hacer magia y compartir magia, más y mejor crecerán. 

Por otro lado, les aconsejaría que no se obsesionaran con aprender una cantidad ingente de juegos de magia, no es necesario. Si eligen un pequeño repertorio de lo que a ellos les llene más, les emocione o les sorprenda en mayor medida, que se queden con ellos y los prueben constantemente, poco a poco irán surgiendo las mejoras, los detalles, irán amoldándolos a su personalidad…así es como se construye o adapta un efecto. Se cambia al público, no a los efectos. 

En relación con la anterior y por tu trayectoria, estoy seguro que te ha sucedido más de una situación peculiar en el escenario. 

Muuuuuuchas, y de toda naturaleza. Si me tuviese que quedar con una, probablemente sería en un local que estaba en Vegueta (casco antiguo de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria), donde me encontraba realizando el billete al limón. Bien, llega el momento de comerse los plátanos y el espectador resulta que es DIABÉTICO y ENCIMA, me dice en escena que tiene que hacerse una analítica por la mañana. Pues nada, sin pensármelo dos veces, me zampo los dos plátanos aprovechando la situación para incrementar la comicidad del juego pero puesta en el mago en lugar del espectador. El juego salió de maravilla, pero el empacho de plátano que me pegué y sin una gota de agua aun lo recuerdo. (Esto me sirve para saber a qué expongo a los espectadores)(Risas). 

Estás estudiando magisterio y enseñar es una palabra muy ligada a esa carrera. Por eso y como sé que hace poquito has empezado a llevar a cabo talleres en Fuerteventura, ¿cómo está siendo esa experiencia de enseñar ilusionismo?

Enseñar ilusionismo es una experiencia que todo mago y maga debe hacer. De acuerdo con las enseñanzas del maestro Gabi Pareras, que en paz descanse, cuando uno pone afuera sus conocimientos y se ve obligado a ordenar sus ideas para poder transmitirlas correctamente, automáticamente se refuerzan y se integran de una manera  mucho más efectiva que como pudieran estar antes de la enseñanza. Todo lo que das, recibes. 

Con esto no digo a todo aprendiz que se ponga a enseñar a todo el mundo. Se necesitan muchos años para ir aprendiendo el arte de la magia, integrándolo, personalizándolo y cuando se acumule esta experiencia, será el momento de enseñar durante otros buenos años. Eso si, aprendan a elegir al estudiante. 

Hay varios libros sobre el tema pero quisiera saber tu opinión ¿cómo ves la relación entre la carrera de Magisterio y la magia o por decirlo más claro qué es para ti la figura del profemago? 

Hoy en día existen muchísimas metodologías en la docencia. Cada vez más, se aboga por unan enseñanza activa, participativa pero que también sea motivadora. La magia en las aulas tiene un potencial terrible. Nos sirve como instrumento mediador en caso de algún conflicto, como herramienta a la hora de introducir una temática nueva, como sistema de recompensas, como control de actitudes… y encima ¡a casi todo el mundo le fascina! 

Hay que aprovechar las virtudes de este arte, y un profe mago es un gran filón para un centro educativo. Si se dan las licencias necesarias en este, se pueden hacer unas clases maravillosas y además, enseñar magia. Con la magia, el alumnado aprende a desenvolverse mejor, a hablar en público, a mejorar sus capacidades motrices (finas y gruesas), a relacionarse más y mejor… son muchas las ventajas de este arte tan versátil. 

Con los tiempos en los que nos estamos moviendo. Muchos han optado por adaptarse y sacar adelante shows virtuales. ¿Qué ventajas  y desventajas le ves a este tipo de shows frente a los presenciales?

Me suelen hacer esta pregunta con frecuencia. La magia se inventó por y para el público y además, para ser presenciada en directo. La capacidad de asombro en directo no tiene nada que ver a verse en una pantalla. Pero estamos ante una tesitura habitual en el arte, y es que los artistas tienen que comer… Por esto, creo que es una decisión muy personal y respetable el que un mago decida hacer shows online. Al espectador le diría que lo vea, que compre entradas a shows virtuales, pero que también vaya al teatro o a una cafetería donde se haga magia, y que se nutra de ambas experiencias. 

Esta pregunta es un tanto delicada por la situación actual pero qué proyectos tienes en un futuro próximo. 

Cada vez tengo más oportunidades de trabajar con personas importantes y eso nos enriquece mútuamente, las ocasiones para continuar trabajando parecen mantenerse en alza. No obstante, uno tiene que mantenerse formándose continuamente para poder ofrecer lo mejor de sí y para seguir creciendo. Me encantaría trabajar en varias localidades de Gran Canaria, pero también me gustaría actuar en las demás islas, hacer llegar mi magia a todo el archipiélago y seguir ilusionando a pequeños de 9 y de 70 años. Proyectos cerrados no tengo en este momento, pero seguir dándome a conocer es parte del proceso y contribuye a que las oportunidades se sigan produciendo, por eso, también haré hincapié a las redes sociales durante este próximo 2022. 

Muchas gracias de nuevo por estar aquí, por invitarnos a conocerte mejor y por el cariño que nos has transmitido. 

Gracias a ti querido Carlos por este proyecto tan bonito, ¡y que viva la la buena MAGIA!

Para seguir conociendo más acerca del trabajo de Abel Delgado, pueden hacerlo a través de su web personal  y redes sociales