Magiqueando con Lola Mento (Beatriz Garrido)



Maga, actriz, payasa, malabarista y globoflexadora (permitan esta pequeña licencia) esta joven jerezana tiene un sinfín de habilidades pero la que más la caracteriza es la solidaridad y su búsqueda constante de la sonrisa. Ello la ha llevado a viajar tratando de repartir ese cariño y amor por una profesión, que no tiene barreras y que traspasa los límites de la imaginación.

Buenos días Beatriz,

Me gustaría nos contaras un poco de ti, ¿qué motivó a esa niña de 16 años a convertirse en la persona que es hoy en día y cómo ha sido tu camino?

La motivación vino por mi inquietud por aprender muchas cosas, cosas divertidas y diferentes. Empecé haciendo teatro en mi ciudad varios años, hasta que decidí irme a Madrid a estudiar Arte Dramático.

En cuanto a la magia, el primer día que llegué a Madrid para hacer las pruebas de acceso, compré la Guía del Ocio para buscar sitios de magia. Vi un anuncio de la Cripta Mágica y llamé sin pensar: “Hola, acabo de llegar a Madrid y quiero ser maga”. Ramón Moy (nunca olvidaré lo atento y cariñoso que fue conmigo, ¡gracias!), me invitó al día siguiente a su sala, dónde en mitad de mi flipaera viendo todo aquello, me recomendó que fuera a estudiar a la escuela de Ana Tamariz. Y así hice. Y justo ese día me dijo: “ Mañana actúa aquí Tamariz, ¿te vienes?” No me lo podía creer. Y ahí empezó todo…

Luego me interesé por el mundo del circo, los payasos, la comedia… Recuerdo que la mejor maestra que he tenido de teatro me dijo: “¿Pero tú que quieres ser?” “Yo quiero ser actriz, maga, globera,bailarina,payasa, malabarista, cómica…” y ella: “Céntrate solo en una cosa”. Y me alegro que fue lo único en lo que no le hice caso. Soy doña dispersa (mi virtud y mi defecto a la vez).

Después de varios años trabajando en teatro y televisión, (y entre trabajo y trabajo pasando penurias), abrí otro camino y empecé a hacer espectáculos de magia y humor. Y ahí sigo… dispersa...


¿Primero está Beatriz y luego Lola Mento o primero Lola Mento y luego Beatriz? ¿Quién suele llevar la voz cantante?

No entiendo bien la pregunta… jajaja. Supongo que Lola Mento es Beatriz pero sin tapujos, sin complejos,sin vergüenza...haciendo las locuras que Beatriz no se atrevería a hacer. Es bonito que encima de un escenario, desde el respeto y el amor, puedes hacer y decir lo que te de la gana, y está permitido. Así que Lola hace eso, lo que le da la gana, sin pensar demasiado si está bien o mal. Ya está por detrás Beatriz para juzgarla y meterle caña.


¿Qué le dirías a aquella Beatriz que daba sus primeros pasos en este arte?

Le diría que no le importara tanto el fracaso y hacer las cosas perfectas. Mi primera actuación de magia fue un desastre, muy desastre. En el Palacio Gaviria en Madrid. Mucha gente, hasta mi familia vino a verme desde Jerez… Y un auténtico desastre: las bolas se caían, el periódico no se abría, los globos explotaban, las cartas iban a su bola, yo sudaba como un cerdito… Frustración total. Y estuve acojonada años.

Pues no pasa nada, no murió nadie. Nada es importante excepto lo importante. Últimamente pruebo cosas y algunas no funcionan… y no me hundo. Bueno, me hundo pero poquito.

Como dije al principio eres una viajera solidaria, una especie de cartera de paquetes cargados de risas ¿Nos podrías hablar de tu labor en Payasos sin fronteras?

Fue una bendita casualidad. Hace doce años, la persona encargada de llevar espectáculos por hospitales y cárceles de España en un programa de Payasos Sin Fronteras, encontró en su cartera(por arte de magia) una tarjeta mía, y me llamó para hacer un espectáculo en el hospital de Zamora. Y ahí empezó un viaje maravilloso que sigue y seguirá mucho tiempo. A los cuatro meses hice mi primera expedición al Líbano, y después vinieron Palestina, Colombia, Costa de Marfil, Serbia, Grecia, Macedonia…


Nuestra labor es llevar risa y apoyo emocional a las personas que lamentablemente lo están pasando mal a causa de guerras, conflictos, desastres naturales, enfermedad… Estas vivencias son un intercambio de amor y humanidad brutal. Y con la gran suerte de conocer a compañeros de viaje maravillosos que me han enseñado muchísimo desde muy diferentes visiones. Y gracias a esto, también pertenezco a Circlosión de Carcajadas: el año pasado estuvimos dos meses en Nicaragua y ahora mismo estoy en Indonesia...

Siguiendo la línea de la pregunta anterior, tú que has estado en lugares donde los conflictos armados están a la orden del día, dónde el miedo y la miseria se toman de la mano ¿se te hace difícil rescatar esa sonrisa perdida, esa ilusión casi apagada por la situación en la que viven sus gentes?

Creo que todas las personas en todo el mundo están dispuestas a reír y a pasarlo bien. Es mágico cuando llegamos a un lugar castigado, y al ratito se convierte en una fiesta de risas, compañerismo y buen rollo. Hablando otro idioma, otra cultura… da igual. La risa es universal. La risa cura, lo tengo claro.


¿Qué recuerdos más entrañables te ha regalado tu faceta artística? Momentos a los que les tengas especial cariño.

Muchísimos. Me quedo con los pequeños momentos en los que eres consciente que estás haciendo un poquito feliz a las personas, aunque sea un rato. Hace muy poco en Barcelona se me acercó un hombre y me dijo: “Hoy he tenido un día de mierda y me lo has arreglado. Gracias”. O una anciana en Colombia: “Gracias mamita, hacía años que no reía”. En esos momentos todo cobra más sentido. Y se me va la idea que me viene a veces de abandonar todo y montar una frutería… No todo es tan bonito como parece y yo soy muy dramática, pero esos recuerdos me dan energía para seguir.


En el espectáculo “Idiomagos”, te unes a MagicSamk y Manu Gómez para crear un ambiente donde la magia y el humor, están todo el rato presente. ¿Cómo surgió esa idea?

Gran idea que tuvo Manu Gómez. Un día, hace más o menos un año y medio, me llamó para tomar un café y me dijo que le había salido una actuación en un local de Jerez y que quería compartirla con MagicSamk y conmigo. Yo a MagicSamk lo conocía solo de vista… Así que montamos una actuación con mucha magia y muchas idioteces y lo hicimos. Y vimos que molaba y que nos lo pasábamos bomba, ¿y por qué no seguir? Nos pusimos a trabajar, a crear idioteces, a comer donuts reunidos en nuestra Magic-cueva. Los tres idiotas: El titi boy, la diva venida a menos y el aspirante a titi boy.


En poco tiempo colgábamos el cartel de entradas agotadas en todos los sitios a los que íbamos, una alegría muy grande. Nos están pasando cosas que ni imaginábamos.En breve actuaremos en el Congreso Mágico Nacional, ¡yujuu! Creo que funciona porque somos muy diferentes, nos lo pasamos muy bien y no tenemos filtro. Idiotez que se nos ocurre la hacemos. Siempre y cuando dos de los tres vote que sí, ¡pero siempre es sí! Ya ni preguntamos.

El otro día estábamos MagicSamk y yo y le mandamos un whatsapp a Manu: “Titi boy, compra un mono en Amazon”. Y él ni preguntó para qué. Al minuto ya teníamos unos cuantos whatsapps con monos de Amazon.

Ahora te encuentras en una etapa minimalista, por eso te quería preguntar acerca de ello, ya que parece que con el tiempo uno se va dando cuenta que el refrán “el que más tiene, más quiere” llevaba razón. ¿Es difícil nadar contracorriente dada la sociedad de consumo en la que nos movemos?

Bueno, este proceso lleva años, yo aún estoy en el camino. Intento ser consciente de lo que tengo y por qué y para qué lo tengo, e intento quedarme con lo esencial. Todo empezó hace dos años: hice limpieza profunda en la cocina y encontré ¡5 botes de curry!. Me sentí una loca y un desastre. ¡Vivo sola y tenía 5 botes! Ahí fue el clip para decirme: “Nena, menos es más”. Ahora intento no tener por tener. Creo que tenemos demasiado de todo y no somos conscientes. Pero aún me queda mucho. A veces me ven como un bicho raro por vivir sin tele, sin microondas… Y por supuesto, me encanta el curry, pero solo tengo un botecito.


Me gustaría que compartieras con nosotros un libro que recomendarías, puede ser de magia o de otra temática

Mr.Vértigo de Paul Auster. No es un libro de magia, es una novela muy mágica. Habla del tesón, la pasión,las ganas, la seguridad en uno mismo, el trabajo...y un niño que quería volar. Una maravilla de libro, que si eres mago te gustará muchísimo.

Aunque antes ya nos desvelaste un poco acerca de esto, quiero aprovechar que nos visitas para que nos dejes algún consejo para quién empieza

Sobre todo que haga lo que le de la gana, sin juzgarse. Y que vea espectáculos con todos los sentidos abiertos. De todo. Se aprende mucho. Vas sacando tus propias conclusiones de por qué algo o alguien funciona o por qué no. Y escuchar al público: si sacan el móvil, si tosen… Yo voy a disfrutar, y luego en casa analizo el por qué de cada cosa, de cada reacción. Y también veo espectáculos que no me gustan para recordarme lo que no tengo que hacer.


Antes de terminar, me gustaría nos dijeras si se presentan nuevas fronteras en la vida de Lola Mento para este año

Pues por suerte este año hay varios viajes y varios trabajos muuuuuy chulos por ahí. Yo soy feliz haciendo poco a poco. Ya no soy tan ambiciosa como antes ni tengo metas tan grandes. Disfruto de cada trabajo y me lo paso bien. Bueno te acabo de mentir. Algunas actuaciones por desgracia son bolos alimenticios.

Muchas gracias Beatriz por estar aquí hoy, regalándonos tu simpatía y tu magia tan emotiva. Deseo que sigas siendo esa cartera que reparte ilusión y que transforma los miedos y la tristeza en una amplia sonrisa.

Gracias a ti Carlos. Te deseo muchas risas. ¡Besos millones!


Para saber más acerca del trabajo de Lola Mento (Beatriz Garrido), pueden consultar su página web y redes sociales 

                                 

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