Magiqueando con Carlos Adriano

Compositor de sonrisas, creador de más de una situación donde la comedia y la magia hacen su encuentro más soñado. Este mago argentino afincado en Madrid, teje sus redes de ilusión y de sonrisas en todos y cada uno de sus espectáculos y nos invita a conocerle un poquito más hoy a través de sus palabras y de su experiencia.

Buenos días Carlos,

Estoy seguro que a nuestros lectores les gustara conocer quién hay detrás de la máscara de este mago y ladrón de risas

Podrías desvelar cómo fueron tus inicios y qué te llevo a cruzar el océano y llegar a esta tierra

Empecé en el mundo de la magia desde muy pequeño. La primera vez que me subí a un escenario tenía 14 años. Enseguida supe que era mi pasión. Siempre me he sentido muy afortunado por saber de muy joven que quería vivir mi vida sobre los escenarios. En el 2001, Argentina sufrió una crisis muy grande que me empujó a cruzar el charco para buscar nuevos caminos. Así llegué a España, intentando seguir con mi carrera artística.

¿Qué ha sido para ti la magia? ¿Qué te ha aportado en tu vida tanto en lo profesional como a nivel personal?

La magia para mi es todo. Es mi pasión, mi trabajo, mi sustento, mi hobby. Ha influido en todos los aspectos de mi vida. A mi pareja, por ejemplo, la conocí gracias a la magia.

Si no estoy equivocado, la mayoría de tus actuaciones son para público familiar e infantil ¿Qué es lo que tiene este tipo de magia que te ha cautivado para dedicarte a ello?

Que me dedicara a este tipo de espectáculos es un poco casualidad. No fue una decisión meditada. Los caminos de mi vida fueron llevándome por ahí y con el tiempo fui aprendiendo a disfrutarlo. Hoy no entiendo mi trabajo de otra forma. Como dijo el poeta: caminante no hay camino, se hace camino al andar…

Nos podrías hablar acerca del clown y qué papel ha jugado en tus espectáculos

El clown cambió mi vida. Tanto arriba como debajo de los escenarios. Siempre me interesó esta disciplina pero empecé a estudiarla después que la magia. El clown hace que te conozcas a ti mismo y te da herramientas para plasmar esa personalidad única, individual e irrepetible en escena. La gente cree que el clown sirve solo para hacer reír pero es mucho más que eso. Hace que tu trabajo sea único e irrepetible. Cualquiera puede copiar un truco pero nadie puede copiar tu forma de ser.

Este tema quizás es un tanto delicado pero creo que merece la pena hablarlo ¿Qué opinión te merece la técnica? ¿Crees que está por encima del efecto o al contrario?

La técnica es importantísima para la consecución de un efecto. Pero a mí me gusta mirar un poco más allá. Siempre que escribo o hablo de mis conceptos mágicos parto desde la hipótesis que la técnica está perfectamente dominada y a partir de allí plantear la evolución del acto. Es imposible aprender a correr sin saber caminar.

Si tuvieras que aconsejar a aquellos que comienzan su andadura mágica o que se encuentran en ello, ¿qué les dirías?

Que le pongan pasión. Es el único camino.

Me vas a permitir hacerte un disección, no te asustes, seré cuidadoso. Cuando vas a salir a escena y durante tus números, ¿qué pensamientos pasan por tu cabeza? ¿Sueles tener un esquema mental o vas adaptándote al momento y al público?

Depende de dónde actúe. Si es un espectáculo Teatral está todo perfectamente estructurado, si es en calle a pesar de haber una estructura, el trabajo es más libre y depende en mayor medida del público. Igualmente por mi forma de trabajar, siempre hay espacio para el juego y la improvisación

¿Qué recuerdos atesoras con especial cariño después de tantos años subido en los escenarios?

Muchos, quizás uno de los más especiales fue la primera vez que trabaje en calle pasando la gorra. Fue hace muchísimo tiempo. Tenía 17 años. Actuamos con un amigo en Mar del Plata, una ciudad turística con playa. Todo lo que juntamos en la gorra fue un peso. Nos alcanzó para comprarnos una cerveza para compartir entre ambos. Le tengo cariño a ese momento porque fue un punto de inflexión. Si me hubiera decepcionado por el poco dinero ganado no habría seguido actuando pero evidentemente la pasión pudo más.

¿Cuáles son tus referentes? Aquellos que te han ayudado a crecer como mago y que han inspirado tus pasos

De pequeño quería ser como Copperfield o Lance Burton o James Dimare. Aquellos artistas a los que veía en VHS o leía en las revistas. Pero posiblemente, quien más ha influido en mi trabajo sea Avner the Excentric, a quien admiro desde siempre y con quien he tenido la fortuna de estudiar y trabajar.

¿Qué libros recomendarías para los amantes de este arte, los que han sido tus compañeros en este viaje mágico?

Además de los míos??? Jejejeje

Seguramente la mejor enciclopedia de magia sea la colección Tarbell

Tras varias publicaciones a tus espaldas, no hace mucho ha nacido tu último libro “Bajo el sombrero. Apuntes desde mis zapatos” ¿Qué buscabas transmitir con él?

Es mi libro más íntimo hasta el momento. En realidad lo único que busco es contar mis ideas, mis conceptos. Me gusta escribir y suelo publicar para que esos textos no se pierdan y si de rebote aportan algo a la magia fantástico.

Siguiendo la línea de la pregunta anterior y sabiendo que a los lectores del blog les gustará saberlo ¿Qué le queda al mago Carlos Adriano por compartir? ¿Nos podrías desvelar alguna pincelada de tus futuros proyectos?

En primer lugar seguir subiéndome a los escenarios. Ahora mismo estoy con un nuevo espectáculo en los teatros Luchana de Madrid y acabo de firmar una segunda temporada. Estoy como columnista en la revista The Linking Ring. Doy clases en la Universidad de magia. Viajo mucho a festivales y eventos. Todo eso me hace muy feliz por lo que mientras me dejen mi proyecto es seguir adelante. Hay algunos proyectos más dando vueltas pero me los guardo para mi hasta que empiecen a concretarse.

Muchas gracias por querer pasar un rato entre amigos, con el telón de fondo de la magia y regalándonos tu forma de ver y amar este arte.